La Matriz de la Transformación y las Fronteras de la Psicoterapia
El Cuidado con el Alma.
La palabra “psique” es tan antigua como Homero, significa “Alma”. La palabra “Terapia” es tan antigua como Pitágoras, que adquirió sus habilidadades de las tradiciones de las medicinas holísticas de Egipto, significa “cuidado”. La psicoterapia tiene una historia tan vieja como la cultura humana: significa cuidado con el alma.
Los antiguos griegos incluiían el cuerpo en su concepto de “Therapeia”. Hipócrates tomó como su máxima: “mens sana in corpore sano”. Los principios de la abreacción terapéutica adoptados por Breuer y Freud en los comienzos del psicoanálisis, eran una extensión de los principios de la catarsis, de la forma como eran empleados en el teatro griego. Freud escogió el término “Complejo de Edipo” extraído de los conflictos de un hombre ciego, cojo, en un drama de Sófocles, para nombrar la mezcla de los sentimientos humanos acerca de la sexualidad.
Contemporáneo de Pitágoras, el médico personal de Siddartha Gautama, el príncipe hindú que se tornó al Buda, era un hombre llamado Jivaka. Él heredó las tradiciones antiguas de la terapia derivadas de la medicina Ayurvédica y enseñó la tradición del equilibrio en el cuerpo, en la mente y en los sentimientos. La medicina Ayurvédica bien como la medicina tibetana fundada en la tradición budista fueron reconocidas como grandes sistemas médicos del mundo en la reciente Enciclopedia de Medicina compilada para la Comunidad Europea. Esas tradiciones de millares de años son presentadas lado a lado con la tradición de la Psicoterapia Corporal de este siglo inaugurada por Wilhem Reich. Las tradiciones milenarias de la medicina oriental complementan, se cruzan y se correlacionan con las tradiciones modernas de otras medicinas.
El sistema budista de psicoterapia corporal era ampliamente diseminado por el gran Rey hindú Asoka en el tercer milenio antes de Cristo. Los principios enseñados en los hospitales eran congruentes con el principio descripto por el clínico budista Susruta en un libro escrito en Casca de Betula, en el manuscrito de Gupta (sánscrito): “las pasiones y las emociones fuertes pueden causar no apenas enfermedades mentales, pueden hasta ser responsables de ciertas condiciones físicas (…)”. Los emisarios de Asoka viajaron por todo occidente y el principal centro budista del mundo occidental fue, por varios siglos, “Alexandría”, donde las escuelas de terapeutas del cuerpo y de la mente conocidos como “Terapeutaes” practicaban, influenciados tanto por la tradición pitagórica cuanto por la budista.
De acuerdo con los antiguos registros apócrifos, Jesús pasó su infancia y comienzos de la vida adulta en Egipto, principalmente en Alejandría. Sus propias enseñanzas sobre la relación psicosomática entre algunas enfermedades corporales y estados psicobiológicos, como la culpa y el miedo, fueron equiparados, hasta cierto grado, al trabajo desarrollado en el mismo período por Apolonio de Tiana, un terapeuta pitagórico.
Ammonias Saccas, un filosófo cristiano del siglo III d.C. y maestro de Origen y Plotino, enseñó un sistema mixto budista-cristiano de autopercepción, fundó una escuela de desarrollo y sabiduría corporificada, también influenciada por las tradiciones herméticas de Egipto. A eso se siguió una larga historia, la perdida tradición alternativa del Movimiento secreto cristiano y las transmutaciones alquímicas, un aprendizaje cualificado de la transformación del “self”, transmitido por Marsílio Ficino y los cabalístas cristianos del Renacimiento a Paracelso, el psicofísico del siglo XVI, que culminó en la protopsicoterapia de Anton Mesmer.
Mesmer trabajó con el magnetismo animal, con las corrientes de energía en los cuerpos de sus pacientes que podrían ser influenciadas por el Toque y el Movimiento. Su trabajo condujo directamente, por medio de los primeros etnólogos, a los inicios de la psicoterapia psicodinámica en el comienzo de este siglo, formulada por Breuer y Freud.
Esta breve panorámica tiene el objetivo de señalar que la psicoterapia, lejos de ser un invento del siglo XX, posee una historia transcultural milenaria.
Psicoterapia en las Barricadas
“Cien años de Psicoterapia”, escribe James Hillman, un psicoterapeuta en la tradición de Ficino y Jung, “y el mundo está quedando peor”. El cuidado con el alma fue reivindicado sucesivamente como monopolio de una casta de cientistas, que eran médicos o psicólogos. La política social que subyace a este encierro de la psicoterapia en la rigidez del cientificismo reduccionista fue descripta en la monografía “Organism and Organization”, de mi autoría.
En un reciente suceso editorial, Brian Appleyard demostró, a partir de la historia de la ciencia occidental, como el reduccionismo invadió cada vez más las áreas de la psique humana hasta tornarse un autoritarismo del alma. El debate de la psicoterapia actual en esta última década del milenio, en la mayoría de los países de Europa Occidental, es un debate entre sistemas abiertos y cerrados, paradigmas nuevos y viejos, posibilidades modernas y posmodernas de regeneración y recuperación.
La Psicoterapia, como disciplina y profesión, se defronta con tres, cuatro fronteras, que buscan limitarla y confinarla entre parámetros cada vez más estrechos.
La frontera académica busca reducir la psicoterapia a algo posible de verificación empírica, y comprendiendo de manera comportamental, fruto de un estudio universitario de psicología clínica académica, de carácter fundamentalmente conservador por naturaleza, y que puede exigir un mínimo de experiencia psicoterapéutica real o práctica antes de otorgar el permiso legal para que alguien use la denominación “Psicoterapeuta”. La frontera interna es un encuadramiento político-económico cerrado, fuertemente racionalizado “como científico”, basado en conceptos ambiguos de ciencia mal empleada, para fines políticos de manipulación. Amenaza excluir muchas formas de psicoterapias valiosas y bien establecidas (incluyéndose el análisis jungiano, algunas formas de psicoanálisis y, naturalmente, todas las áreas de la psicoterapia y psicología humanísticas).
La frontera biológica excluye el cuerpo. El principal avance desarrollado por Wilhem Reich en los años 30, integrando el Psique y el Soma en la Vegetoterapia Caractero Analítica, y las innumerables diferenciaciones subsecuentes en el campo de la psicoterapia corporal son todas requisitadas a permanecer fuera de la frontera biológica.
Los terapeutas pueden estar sintiéndose “desafiados en exceso por el cuerpo”. El Congreso de Psicoterapia de Lindau, en mayo de 1991 llegó a reconocer al cuerpo como un anexo a la psicoterapia, pero no tan lejos al punto de reconocer la existencia de algo llamado psicoterapia corporal.
La frontera política excluye las implicaciones sociales revolucionarias de los descubrimientos de los estudios psicodinámicos. Uno de los ejemplos más claros aquí es el cambio en la crítica freudiana de las circunstancias sociales que producirían la neurosis en la infancia. Jefrey Manson describió el modo como el psicoanálisis está enraizado en el conocimiento de Freud sobre la profundidad y la severidad del abuso físico y sexual del infante por parte de los padres. Todavía así él abandonó su teoría original de la pulsión, que era profundamente crítica con relaciones a las circnstancias de su tiempo y desarrolló la segunda teoría pulsional, de acuerdo con la cual las neurosisis infantiles se deben a desvíos de deseos no satisfechos de contacto sexual con los padres, el así llamado Complejo de Edipo.
Wilhem Reich desenvolvió los aspectos psicodinámicos de la Psicología de las Masas en su crítica al fascismo, y su apoyo a los principios vibratorios con relación a los cambios sociales. Los psicoanalistas decidieron no tener más nada que ver con él.
La frontera espiritual restringe la psicoterapia a una resolución de problemas, aunque sean creados por conflictos inconcientes o tensiones sociales. La exploración de niveles más profundos del ser en el hombre por medio de los cuales se puede entrar en contacto con fuentes potenciales de transformación, es sospechada de ser “mística”, una “proyección de deseo inconciente de alcanzar el paraíso”, o “no científica”, por no “empírica”.
Existen, por lo tanto, cinco grupos de psicoterapeutas, todos ellos presentando una tendencia en sospechar de los demás: los psicólogos académicos, ávidos por demostrar que todos los otros no son “científicos”; psicoterapeutas políticos, listos para ver todos los otros como demasiado psicológicos, radicales o místicos; los psicoterapeutas espirituales, con miedo del cuerpo, de la política y de dejarse enredar excesivamente en la historia familiar del paciente; y los psicoterapeutas psicodinámicos clásicos, trabajando dentro de los conceptos estructurales del procedimiento analítico, excluyendo el cuerpo, del alma y la sociedad.
El Campo de Transformación
Los límites que cercan el término terapia tienen relación con las palabras cura, crecimiento y desenvolvimiento. La leyes de muchos países buscan restringir la práctica de la psicoterapia a un estrecho cartel de médicos o psicólgos.
Toda terapia es una cuestión de cura?, alguien precisa estar enfermo para desenvolverse?, de qué modo la cura de las heridas del alma esta relacionada con la transformación de la situación de vida o la efectivización del potencial de un individuo dotado?, la terapia es el tratamiento o la prevención de la enfermedad?.
El campo de transformación es más amplio que el campo de la “terapia”, cuando la “terapia” se encuentra legalmente restringida a especialistas entrenados en las tradiciones académicas occidentales, controladas por fuerzas socio-económicas y burocracias políticas.
La terapia es una parte del campo de la transformación, pero también lo es la educación, la meditación, la medicina planetaria y la ecología. El arte, la danza, la poesía, la música y el teatro tambíen pueden ser parte del campo de la transformación. Y los eventos integrados que envuelven la vida expresiva de una persona eran bien conocidos por los antiguos griegos, que usaban el término “catharsis” (purificación), para describir sus efectos de transformación.
El trabajo de transformación se puede focalizar estrictamente en los problemas de las personas física o mentalmente enfermas. Esta es la definición restringida de la terapia. O puede focalizarse en el campo mucho mayor de las necesidades de desenvolvimiento de los seres humanos, en la medida en que se mueven por el espectro de la bien conocida jerarquía de las necesidades fundamentales, formulada por Abraham Maslow. Gerhrad Crombach en un artículo sobre la perspectiva estética en psicología y en psicoterapia, sugiere que la psicoterapia tiene cinco áreas principales de preocupación, dentro de las cuales la psicoterapia clínica es apenas una. Las cuatro restantes son las que él llama: “enriquecimiento de la vida”, “emancipación”, “madurez”y “sabiduría”.
En todos esos campos de psicoterapia, la trasformación encontrará la fuerzas sociales que crean la ausencia de salud y bloquean e impiden el desenvolvimiento. El verdadero trabajo de transformación es políticamente peligroso en una sociedad totalitaria, tanto que el psicoanálisis fue impedido, abolido, bajo muchas dictaduras, ya que la transformación es un trabajo de liberación, y la liberación es una amenaza a todas las sociedades autoritarias. Eso significa que el trabajo de transformación tiene la elección de reconocer que es socialmente radical, como las enseñanzas del maestro de meditación vietnamita Tich Naht Than, que pueden despertar a las personas para su ser interior (eisen) de tal manera que la presión política contra muchas formas de deshumanidad aumente ; o como el trabajo de Wilhem Reich, que después de su desarrollo de las raíces psicológicas del fascismo fue perseguido por Hitler. De manera similar, el trabajo educativo de Paulo Freire, fue peligroso políticamente, porque los camponeses, educados, comenzaron a discutir sus condiciones y a cuestionarlas. Del mismo modo que la teología de la liberación en América del Sur.
Niveles de Organización
La matriz de la transformación revela poseer dos delimitaciones verticales entre las dimensiones de la experiencia, definiendo tres regiones de la preocupación terapéutica: una intrapersonal, otra interpersonal y otra pospersonal. La intrapersonal e intraorgánica observa los conflictos internos y los efectos del strees en una persona. Puede buscar tratar las causas o lidiar con los efectos, dependiendo de la profundidad del abordaje pautado por el terapeuta. La segunda región lidia con las relaciones humanas y el desenvolvimiento del potencial humano en la interacción con los otros. La tercera región reconoce las raíces sociales y culturales de la mayor parte de la infelicidad humana, y se propone buscar las causas y transformar las formas sociales que generan la neurosis, así como crear formas políticas para ayudar a disminuir el sufrimiento en los seres humanos.
Dimensiones de la Existencia
La palabra Psique (ánima en latín, seele en alemán) abraza a nuestra vida afectiva, bien como la cognitiva, imaginativa y relacional. El trabajo de transformación con la psique no encuentra apenas dos delimitaciones verticales, como fue descripto encima, más dos delimitaciones fronteras, o puentes horizontales que también son guardadas de cada lado del puente, o son zonas de fase de transición entre dimensiones de la experiencia. Hay una frontera infrapsíquica que nos conecta con nuestra biología, con el cuerpo y con nuestra naturaleza animal, y una frontera suprapsíquica, que nos conecta con formas transpersonales de experiencia, con la ética y con la esfera de los valores esenciales asociados a los significados más profundos de la palabra “espiritualidad”.
Para comprender esas dos fronteras, precisamos un concepto de dimensiones de la existencia. Tal concepto fue bien desarrollado por Andreas Resh, un profesor austríaco de psicología, que sugiere que hay cuatro dimensiones existenciales de la realidad posibles de distinción y que pueden ser ordenadas por potencia organizacional.
La primera demensión es la materia, de los campos y fuerzas físicas (physis). La segunda es la dimensión de las formas de la vida, de los virus primitivos, de los organismos complejos y de los ecosistemas (bios). La tercera es la dimensión de los pensamientos, sentimientos, percepciones y comportamiento humano (psique). La cuarta es la dimensión del autoconocimiento, de los valores y elecciones éticas, bien como de la espiritualidad (pneuma).
La Frontera Psicosomática
La psicoterapia, en su delimitación prepersonal, entra en una fase de transición con la dimensión del cuerpo y, a través de eso, con la energía bioeléctrica y otras energías que funcionan en un nivel hasta más profundo del principio de funcionamiento común (W. Reich).
En mi artículo “Somatic Psycotherapy: Its roots and traditions” (Psicoterapia Somática: Sus raíces y tradiciones) resumí los progresos alcanzados en las muchas formas de integración de la psique y del soma al cruzar esta frontera. No obstante, muchos psicoterapeutas todavía desconfían del cuerpo y lo tratan como un apéndice, en el mejor de los casos (ver “Organism and Organization”, Organismo y Organización) o como un intruso, un estorbo o un peligro (amenza sexual). Pero las defensas con relación a esas fronteras también pueden surgir del lado del cuerpo. Algunos terapeutas reichianos que se autodenominan “terapeutas corporales”, trancaron la psique del lado de afuera en su definición, una vez que es posible trabajar directamente con el flujo de la energía. Eso llevó a una extensa discusión entre mí yVolker Knapp Dicericht y entre Peter Bolen y Loil Neid Hofer en la publicación austríaca “Pulsation”.
Al despecho de esas amarras contradefensivas de la frontera entre el psique y el soma del lado somático, el principal credo de la Vegetoterapia Caractero analítica de Wilhem Reich, y de su principio de identidad y antítesis psicosomática, era realizar una integración maciza de estas dos dimensiones, y la mayoría de los psicoterapeutas corporales continuaron en esta tradición, mismo si algunos de ellos tendieron excesivamente para uno de los dos lados de esta polaridad a expensas del otro.
La Frontera Psicoespiritual
Me vuelvo ahora para la frontera Transpersonal entre la dimensión de la psique y la dimensión del pneuma. Esta es la frontera entre lo así llamado “psicosocial” y lo espiritual. La palabra “espiritual” posee un significado peyorativo para algunas personas dada su asociación con los aspectos represivos de la religión, o con formas desenraizadas del escapismo místico.
La esfera del pneuma es la esfera de la esencia, de los significados, de los valores y de las cualidades tales como la compasión, la preocupación con el planeta y el cuidado con el prójimo. Es la esfera de aquello que Poltich llama “preocupación última”. Ella trasciende los sistemas de creencias preconceptuales y las formas condicionadas de emocionalidad. Es un nivel en el cual la humanidad común puede unir a las personas más allá de las barreras raciales, políticas y culturales. Aplicado a la conciencia ecológica, es un nivel en el cual despertamos y accionamos con conciencia en relación a los sistemas de vida y del planeta. Es el área de lo imperativo categórico de Kant, de la afirmación de Buda al morir: “Trabaje para su salvación con diligencia”, y las enseñanzas de Jesús de Galilea, “para amar a tu prójimo como a ti mismo”.
La psicoterapia heredó de Freud una sospecha con relación a la religion institucionalizada con base en sus efectos demostrables de represión e inducción a la neurosis. Y Carl Jung rompió con Freud por esa cuestión, una vez que percibía niveles de significado más profundo en los muchos tipos de tradición espiritual que estudió. Jung fue un pionero al visualizar las frontera psicoespiritual, aunque como Moisés pueda nunca haber ingresado plenamente en la tierra prometida que mapeó con tamaño detalle. Su deseo de permanecer empírico lo condujo a psicologizar demasiado las tradiciones espirituales y a la tendencia a reducirlas al nivel del inconciente colectivo.
Wilhem Reich, que desenvolvió, a partir de Freud, los aspectos somático-energéticos latentes de la teoría de la libido, se tornó el fundador de la psicoterapia corporal moderna. Reich era un íconoclasta y un formador de paradigmas. Su trabajo que abrazaba la biología, la sociología y la sociología de la neurosis, se constituyó en una crítica maciza de los múltiples dualismos que atormentaran toda la psicología y la cultura oficial.
Reich estaba reivindicando un cambio de paradigma en la conciencia humana- un llamado para la reversión de la “metanoia”, en una nueva dirección. En el último período de su vida, él escribió un libro apasionante, desenvolviendo el núcleo mitológico de la vida de Cristo con el epítomo de la naturaleza esencial de la inocencia original no distorsionada del infante. En ese trabajo, a ejemplo de sus trabajos anteriores, Reich fue el fundador de la medicina biopsicosocial, bien como uno de los fundadores,antes de James Lovelock, de la medicina planetaria. De su trabajo tomo como base, desde el inicio, los manantiales del amor, del trabajo y del conocimiento como fuentes creativas de la vida. El estudio de Reich sobre Cristo es una expresión menos mística, más política y muchos más somática de la que Jung desenvolvió en su libro Aion, escrito casi en la misma época. Reich estaba abriendo al contacto entre el espacio interior y el exterior, y el tema de las raíces del hombre en la naturaleza y su deseo cósmico, la naturaleza de la propia autoconciencia y el espíritu de la vida en el ser humano en su naturaleza esencial. Su trabajo extenso sobre la energía orgónica fue una tentativa de perscrutar los orígenes del mundo, el sustrato preatómico y subnuclear.
Aunque usase el término “energía” en sus descripciones, es evidente que él salió del dominio de las cuatro dimensiones del tiempo, del espacio y del entendimiento clásico de la energía de masa. Él estaba investigando la esfera virtual en la cual la masa y la energía se originan. Esa es la dimensión que David Bom (anteriormente profesor emérito de física en la facultad Birkbeck, en la Universidad de Londres) llamó de “orden implicada” y que Burckhard Heim, en su historia de gravedad-cuantum, llevó mucho más allá, para una transcosmología que lidia con campos de información libres de masa que generan el universo físico, y a partir del cual se pueden predecir con precisión las propiedades físicas de todas las partículas fundamentales.
Las investigaciones de Reich que fueron más allá de la frontera transpersonal, en el período final de su vida, fueron continuadas por la iniciativa de los muchos de los varios tipos de psicoterapia corporal que se desenvolvieran con su despertar.
Más allá del Reduccionismo
El modelo de transformación desarrollado en este texto muestra que el trabajo de transformación es una idea total. Terapeutas, educadores, psicólogos, curadores, consejeros, cualquiera que sea la forma en que los denominemos, podemos elegir la especialización en apenas un área. Las presiones políticas, por otro lado, pueden amenazar de tratarnos como refugiados de los territorios profesionales en los cuales habitamos por largo tiempo. Las fronteras entre las nueve regiones de la matriz de transformación son constructos artificiales, y el trabajo verdadero para ayudar a los seres humanos atraviesa tanto las dos fronteras horizontales entre lo intrapersonal, lo interpersonal y lo extrapersonal, como las fronteras verticales entre lo prepersonal, lo personal y lo transpersonal.
La transformación envuelve la diferenciación, mas no conoce tales fronteras. La transformación es un trabajo en el cual el cuerpo puede abrir a la mente y el buen trabajo con el carácter puede abrir el cuerpo. Es un trabajo en el cual el cuerpo puede abrirse para profundas fuentes de espiritualidad, y en el cual la meditación puede conducir a un contacto más profundo y rico con el cuerpo. Es un trabajo en el cual los problemas individuales son vistos en un contexto social, y las presiones culturales y políticas son reconocidas como proceso reales, y no fantasías inconcientes. Es un trabajo para, específicamente, capacitar a las personas a abrir las fronteras que desmembran la vida y cinden el cuerpo de la mente, la mente del espíritu y el espíritu de la cultura.
Señales de un cambio de paradigma
A medida que nos aproximamos al próximo milenio, hay cierto número de señales de un cambio significativo de paradigma de parte de la psicoterapia, de la medicina psicosomática y del trabajo eco-político.
Al paso que los campos de la psicología, biología y sociología lucharan frecuentemente para controlar sus territorios respectivos y mantener los invasores afuera, el nuevo paradigma mira para la salud y la enfermedad en términos de la interacción entre esos tres campos.
Un psiquiatra suizo “trainee” (formado) en Biosíntesis, organizó recientemente en Berna el XXI Congreso Mundial de Medicina Psicosomática sobre la siguiente denominación: “Cómo podemos ayudar?: intervenciones psicosociales y psicoterapias en la medicina”. Al inaugurarlo la ministra del Interior y de la Salud de Suiza, Ruth Dhreifuss escribió lo siguiente: “Acertadamente o erradamente, la medicina tradicional de los días de hoy era considerada con mucha frecuencia como el único tipo de medicina basada en el progreso técnico. Mas en las últimas décadas, puntos de vista contrarios hicieron un gran progreso, tanto ante los propios médicos como ante los pacientes. La medicina biopsicosocial es considerada actualmente de gran importancia por muchos médicos en su mayoría clínicos generales”.
La conferencia fue abierta a muchas presentaciones por parte de psicoterapeutas corporales y un cierto número de presentaciones sobre los aspectos políticos sociales del stress incluyendo un concierto en solidaridad a las víctimas de la guerra y la violencia en Bosnia. En el congreso, la Cruz Roja suiza anunció la creación de un proyecto de investigación y tratamiento en la terapia de las víctimas de tortura y al relatar ese proyecto, enfatizó la necesidad de un abordaje interdisciplinario, en el cual sería muy importante integrar terapia corporal “psicologicamente fundamentada”.
La conferencia fue apoyada por la Federación Internacional de Psicoterapia, cuyo XVI Congreso en Seul, tuvo como tema “Psicoterapia del Este y del Oeste”, con foco central para la integración de la psicoterapia. Aproximadamente un tercio del tiempo planeado para el congreso será dedicado a la interfase entre psicoterapia y tradiciones espirituales.
En el congreso de Berna, fueron distribuidas copias del diario japonés de medicina psicosomática (Shinshin Igaku). Este diario fue fundado por el Dr. Hitoshi Ishikawa en 1981. El Dr. Ishikawa fue, hasta su muerte, en el final de los años ochenta, el profesor de medicina psicosomática de la Universidad de Tokio. Fue un pionero corajudo, que patrocinó organizaciones como el Centro Horizonte en Tokio que administraba cursos de psicoterapia corporal, no disponible en ningúna otra institución pública en Japón. Los cursos de Biosíntesis que conduje personalmente en el Centro Horizonte entre 1981 y 1986 siempre fueron supervisados personalmente por el Dr. Hitoshi Ishikawa, que participó totalmente en todos los sentidos de la palabra. La séptima edición del diario que él fundó contiene un texto del Dr. Yujiro Ikemi, profesor emérito de la Universidad Kyushu y profesor del Instituto de medicina psicosomática Fukuoka, el artículo de Ikemi se basa en la ausencia del dualismo entre mente y cuerpo en la tradición oriental, con el objetivo fundamental de activar la autocura y movilizar la energía vital. Él enfatiza el significado central ético y ecológico de la cualidad de vida como un concepto fundador, tanto en psicoterapia cuanto en la medicina de base holística.
La cualidad de vida fue un foco central en la reunión de la Fundación Cruz Verde Internacional, el 19 de junio de 1993 en Ginebra, teniendo Mickhail Gorbachev como presidente. En el comienzo de los años cincuenta, Wilhem Reich fue uno de los primeros cientistas en el mundo en alertar sobre los peligros ecológicos planetarios inminentes, y a trazar paralelos entre el desierto interior del hombre y el desierto exterior de su medio ambiente. La Cruz Verde Internacional tiene como uno de sus objetivos el estudio de formas para mejorar el medio ambiente interior y el exterior, y los modos como cada uno colidia o se refleja en el otro. La cualidad de vida puede ser entendida como estando ligada a la jerarquía de las necesidades de Abraham Maslow, comenzando con las necesidades básica de sobrevivencia, pasando por las necesidades emocionales y sexuales hasta las necesidades de un nivel más alto, relacionadas al alcance de los objetivos de una persona y a la realización de sus cualidades esenciales.
El concepto de cualidad de vida puede, así, ser empleado como una lente integradora para focalizar diferetes aspectos de nuestra vida espiritual, emocional, mental y biofísica, en equilibrio con la naturaleza o no.
En 1994, un futuro congreso de psicosomática ocurrirá en Ginebra, teniendo como tema la “educación del paciente en el año 2000”. Él mismo es patrocinado por la Organización Mundial de la Salud. Es un Congreso dirigido para las enfermedades crónicas pesadas, en que todo el foco no está tanto en el tratamiento clínico, como así en la “educación del paciente” y la “mejor calidad de vida”. La organización mundial de la salud está subrayando con urgencia la importancia crucial de los abordajes educacionales para los estados de la enfermedad: esto es, comenzar a enseñar a los seres humanos el modo de cómo recuperar el gerenciamiento de sus propias vidas, a apartarse de patrones y hábitos destructivos, moviéndose para estados creativos de conexión con la vida. Y recuperación de un sentido de significación personal y de placer por estar vivos.
Sociopolíticamente, en 1993 fue un año cero en Europa. Vimos el retorno de las atrocidades de la era del holocausto en Bosnia y la apatía o desamparo de las naciones europeas en respuesta a la destrucción masiva de una de las áreas étnicamente más integradas de Europa. El bombardeo de Sarajevo es un asalto al alma y al cuerpo de cada ser humano. En vez de cualidad de vida, tenemos los diez caballeros del apocalipsis: hambre, frío, enfermedad, pérdida, rapto, tortura, terror, ausencia de techo, heridas y muerte. Los nuevos paradigmas son desesperadamente necesarios, ya pasó el tiempo de alejar las fronteras tradicionales de la psicoterapia académica; precisamos desesperadamente profundizar nuestro contacto con las raíces emocionales del cuerpo y con los valores espirituales y éticos de nuestra herencia, en un nivel en que esos valores tengan un efecto unificador y no sean empleados erradamente, para justificar más cisiones y más guerras; y desenvolver mayor interacción entre las personas preocupadas en mejorar el medio ambiente interno y aquellas que trabajan con el medio ambiente externo.
LA MATRIZ DE LA TRANSFORMACIÓN
(Diagrama)
Dimensiones
Existenciales
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Pneuma | | | |
(Espíritu) | | | | Frontera
————————————————————Transpersonal
| | | |
Psique | | —————————————————————- Frontera
Bio-Fisio | | | | Pre-personal
| | | |
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Niveles de Intrapersonal Interpersonal Extrapersonal
Organización MICRO MESO MACRO
Publicación Original en lengua inglesa en la Revista:
ENERGY AND CHARACTER
Traducida al portugues por: Maya Hantower
Traducida al castellano por: Gastón Rigo.